Casa Cultural Pueblo Libre,  Centro de Estudios Socioeconomicos Roberto Carri

Macrismo y deuda externa. Diserta Alejandro Olmos Gaona

«…Hay pasado décadas, se hicieron refinanciaciones, se acordó el Plan Brady, nuevas reestructuraciones, muchos discursos exitistas de los gobiernos surgidos del PJ y la UCR, además de la llamada «Alianza», y hoy con el gobierno de los empresarios seguimos en lo mismo, como si el tiempo no hubiera pasado. La deuda vuelve una y otra vez a afectar nuestro desarrollo, a condicionar las políticas económicas, a someternos a los organismos internacionales, de los cuales nunca nos pudimos desprender y que hoy fijan las pàutas que el gobierno sigue de manera irrestricta.

Al 30 de septiembre del 2018, la deuda pública total era de 307.630 millones de dólares, representando el 95,4% del PBI, estando el 57,4% en manos de entidades privadas y organismos internacionales. Todavía quedan 2805 millones de dólares en manos de los buitres, y no se ha podido arreglar con los mismos.

El Banco Central tiene una deuda por Leliq de 867.000 millones de pesos y una deuda por pases pasivos (con otros bancos) de 883.200 millones. Esto significa el pago de intereses de 875.000 Millones de pesos en el año: son 2.400 Millones por Día; 72.000 Millones por Mes, de acuerdo a las tasas pactadas
El gobierno se ufana de sus reservas internacionales que casi llegan a los 67.000 millones de dólares que equivalen a 2,474.000 millones de pesos, pero a esa suma hay que descontarle los depósitos en moneda extranjera que equivalen a 519.000 millones de pesos y el swap con China, por 700.800 millones, la deuda por Leliq y pases pasivos que en conjunto suman 1,750.000 millones, por lo cual las reservas son inferiores en 500.000 millones de pesos a las deudas del Banco.
Ninguna de estas cifras son pagables, y la refinanciación permanente supone un costo que se va incrementando día a día, hasta que inexorablemente se llegue a una nueva crisis, con una nueva reestructuración.

El gobierno que suceda a este se tendrá que hacer cargo, y eso significara inevitables y nuevos ajustes,que ya saben de sobra a quienes afectan.

Mientras tanto la dirigencia política mayoritaria, solo piensa en su futuro electoral, en alianzas posibles, en contubernios de variada especie. Ellos como siempre negocian y se llenan la boca de palabritas,pero nunca pagan las consecuencias de sus acciones. Pareciera que a nadie le molesta esa repugnante danza de posibles alianzas y candidaturas. Todos quieren llegar como sea. Después verán como vuelven a tratar de convencer que todo va a mejorar, aunque sigamos en el inexorable camino a una decadencia cada vez mayor…»

Alejandro Olmos Gaona es investigador, historiador y especialista en derecho internacional. Su padre, Alejandro Olmos, durante 18 años impulsó la causa penal que determinó el origen ilícito de la deuda pública argentina, tras un fallo emitido por el juez Jorge Ballestero. El magistrado pudo corroborar la ilicitud de la deuda externa, estableciendo la responsabilidad de los funcionarios de la dictadura que la contrajeron y la corresponsabilidad de organismos internacionales, como el FMI, que aprobaron préstamos fraudulentos.

Alejandro Olmos Gaona continuó el trabajo de su padre: “Me puse a trabajar en el tema porque creo que es mi obligación como ciudadano”, advierte.

Debido a su extensa tarea, fue convocado por el gobierno de Rafael Correa para integrar la Comisión de Auditoría Integral del Crédito Público, que investiga la deuda ecuatoriana, y cuyo informe final fue sumamente contundente respecto al latrocinio acaecido en la Nación hermana.

Olmos Gaona es autor del libro La deuda odiosa. El valor de una doctrina jurídica como instrumento de solución política (Ediciones Continente). También escribió La deuda argentina como delito y La deuda externa argentina y los derechos humanos.

Actualmente se desempeña como Asesor en el Senado de la Nación.

Nos honrará con una nueva visita a nuestra casa para disertar sobre la actuación del gobierno de Macri en materia de deuda externa.

Facebooktwittermail